Ortotipografía: imprescindible conocer sus normas y usos
La ortotipografía se ocupa de las convenciones para escribir correctamente una lengua con caracteres tipográficos. Se encuentra en un territorio donde se juntan dos disciplinas: la ortografía y la tipografía. Conocer sus normas y sus usos es obligado tanto para editores como para diseñadores gráficos.
La ortografía es básicamente el conjunto de normas para escribir en una determinada lengua, ya sea de una forma manual o tipográficamente. Y por tipografía entendemos el diseño de los tipos y de cómo se combinan para transmitir mensajes escritos.
Las diferentes familias tipográficas poseen una gran cantidad de signos gráficos que complementan a los caracteres del abecedario. Estos signos deben ser conocidos y empleados correctamente tanto por los autores de los textos como por los diseñadores y editores de las publicaciones.
La ortotipografía se encarga de todo lo relacionado con el uso de los signos de puntuación, de las mayúsculas y minúsculas, de la utilización de las cursivas o las negritas, de cómo diferenciar las citas o los diálogos, o de cómo y en qué casos utilizar signos como los diferentes tipos de comillas, los paréntesis o los corchetes.
Para José Martínez de Sousa (Ortografía y ortotipografía del español actual, 2008), la ortotipografía es el “conjunto de reglas por las que se rige la confección de un impreso mediante recursos o signos tipográficos”. Se trata de usos y convenciones que se han ido desarrollando y consolidando con el tiempo en el ámbito del diseño y la edición. Estamos hablando, por lo tanto, de una disciplina eminentemente práctica.
La aplicación y revisión del uso correcto y adecuado de estas normas se realiza habitualmente en dos fases. Una primera, en el momento en que el autor escribe y corrige su texto original con un procesador de texto como Word; en esa fase debe señalar las palabras que quiere que aparezcan en cursiva, en negrita o entrecomilladas, los incisos por medio de paréntesis o guiones… En una segunda fase se realiza una revisión ortotipográfica en el documento maquetado o diseñado una vez aplicadas las familias de letra, los tamaños de letra, la interlinea, el ancho de columna, etc. Este trabajo se realiza con un programa de maquetación, compaginación y diseño como InDesign.
Convenciones y normas ortotipográficas
- El contexto en que está escrito
- El género de escritura
- El contenido
- El medio donde se publica
En realidad, lo que hay que buscar es la legibilidad y la coherencia interna del mensaje escrito y de la publicación en su conjunto. Para ello debemos intentar aplicar unos principios tipográficos y de diseño a esa escritura traducida a caracteres.
Estos principios son:
- Funcionalidad
- Legibilidad
- Estética
- Proporción
- Coherencia
Algunos ámbitos de la ortotipografía son:
- Variantes de la letra (redonda, cursiva, negrita)
- Disposición de las citas
- Puntuación de todos y cada uno de los elementos
- Signos llamada
- Enumeración de listas (apartados y sub-apartados)
- Partición de palabras en párrafos
Variantes o diferenciación de letras
Uso de las cursivas:
Utilizamos las cursivas en un texto cuando se cita el nombre de una película, de un libro, de un cuadro o de un programa de televisión. También se debe componer en cursivas las palabras extranjeras, los seudónimos acompañados de nombres reales, determinadas palabras que el autor quiere enfatizar así como nombres científicos de determinadas especies de animales o de plantas.
Uso de las negritas:
En textos divulgativos y con contenidos didácticos se utiliza la negrita para destacar conceptos o datos importantes, para que el lector los visualice rápidamente e interprete que lo remarcado es importante.
En la visualización de datos mediante tablas o gráficos estadísticos, se emplean las negritas para destacar algunas cifras o valores totales con respecto a las redondas.
En las publicaciones periodísticas las negritas pueden utilizarse para:
Las comillas son signos dobles auxiliares de la puntuación. Sirven habitualmente para encerrar porciones de texto que incluyen citas textuales, es decir, la reproducción fiel de un original. Su intención es dejar constancia de que esas palabras se escriben tal y como fueron pronunciadas.
Existen varios tipos de comillas:
En la visualización de datos mediante tablas o gráficos estadísticos, se emplean las negritas para destacar algunas cifras o valores totales con respecto a las redondas.
En las publicaciones periodísticas las negritas pueden utilizarse para:
- Destacar nombres propios dentro de una crónica (muy característico en secciones como Sociedad).
- Destacar en una entrevista los nombres de los interlocutores (entrevistador y entrevistado), o el texto de las preguntas, pues suelen ser más breves que las respuestas, que van en redonda.
- En entradillas, ladillos o destacados no extensos para diferenciar del bloque de texto principal.
Comillas
Las comillas son signos dobles auxiliares de la puntuación. Sirven habitualmente para encerrar porciones de texto que incluyen citas textuales, es decir, la reproducción fiel de un original. Su intención es dejar constancia de que esas palabras se escriben tal y como fueron pronunciadas.
Existen varios tipos de comillas:
- Bajas o latinas
- Bajas angulares
- Voladas o altas
- Voladas simples
- Mecanográficas, variantes de las comillas voladas.
- Antilambda. Se utilizan en matemáticas y en código de programación, como <html>, con el significado mayor que y menor que.
En el campo editorial y en las lenguas hispanas se utilizan tradicionalmente las comillas bajas o latinas. Las comillas altas o voladas se usan para los casos en que sea necesario entrecomillar un texto dentro de otro que ya está entrecomillado.
Cada vez más a menudo se emplean las llamadas comillas mecanográficas (“…”) y se abandonan las tradiciones tipográficas debido en buena medida a la generalización del uso de los procesadores de texto en los ordenadores personales.
Los apóstrofos (‘) y las primas (´) son otros signos simples que pueden confundirse a primera vista con las comillas. Así, la prima y la doble prima se usan habitualmente para indicar los minutos y los segundos.
Con respecto al empleo de las comillas lo más apropiado sería buscar usos coherentes y aplicar siempre los mismos criterios en una misma publicación.
Paréntesis, corchetes y llaves
Los paréntesis (…) se utilizan dentro del texto para incisos que aportan información aclaratoria o complementaria.
Los corchetes […] son habituales en transcripciones de fuentes orales cuando se describe información no verbal [sonríe], o en incisos dentro de incisos para no repetir paréntesis.
Las llaves { - } son utilizados en esquemas, cuadros sinópticos y en matemáticas. Pueden emplearse como signo doble o simple; es decir, por separado, ya sea la llave que abre como la que cierra.
Guiones y otros signos horizontales
Los signos horizontales son una forma eficaz de señalar incisos, es decir, textos que se insertan en otro para explicar algo relacionado con este texto. Disponemos de tres signos parecidos que se diferencian por la longitud horizontal de su trazo:
- Guión (hyphen), ¼ cuadratín
- Menos (minus), ½ cuadratín
- Guión medio (en dash), ½ cuadratín
- Raya (em dash), 1 cuadratín
- Guión bajo (underscore)
La raya es el signo de trazo horizontal más largo (1 cuadratín) y el que se utiliza más habitualmente en la escritura, pues se utiliza para indicar incisos (al igual que las comas y los paréntesis) o para mostrar los interlocutores de los diálogos. Como indica Raquel Marín en su Ortotipografía para diseñadores, en el sector editorial sigue utilizándose la raya pero, de forma similar a lo que sucede con las comillas latinas o bajas, se está abandonando en los periódicos, que cada vez más la sustituyen por el signo menos o por el guión medio.