10 consejos tipográficos

Cómo componer textos más legibles y atractivos con un buen tratamiento tipográfico

La tipografía juega un papel importante en la comunicación con el lector. Cuando hablamos de comunicación estamos hablando de texto, especialmente en el diseño web, donde la tipografía, con sus variables, ocupa un lugar prioritario en el diseño general del documento.

Un buen tratamiento tipográfico hace que el proceso de lectura sea más fácil, rápido y agradable. Por el contrario, una tipografía descuidada expulsa rápidamente a los lectores y usuarios de una publicación, ya sea impresa o en un sitio web.

Optimizar la tipografía es optimizar la legibilidad, la usabilidad, la accesibilidad y el diseño gráfico en su conjunto. Un buen uso de la tipografía también implica mejorar la interfaz.

Estos 10 consejos te ayudarán a mejorar el diseño y la legibilidad de cualquier documento escrito por medio de la tipografía:

CARÁCTER

1. Intenta conocer, reconocer y observar la personalidad y el estilo de las principales clasificaciones de letras (romanas, mecanas, lineales, scripts…). Así podrás elegir las familias adecuadas para cada mensaje.

2. Reduce al mínimo el número de fuentes o familias tipográficas diferentes.

Si utilizas una única familia, procura que sea lo más numerosa y variada posible para poder utilizar todas las variaciones que necesites: en cuanto a grosor (fina, redonda, seminegra, negra, supernegra...), en cuanto a anchura (condensadas...), itálicas, versalitas...

Si utilizas dos familias, que sean muy diferentes, como una romana antigua y una sans serif, para que destaque su contaste. Ten en cuenta que si no son muy distintas (por ejemplo, dos familias romanas) el lector lo percibe como una anomalia y una incoherencia.

3. Utiliza correctamente los estilos o distinciones dentro de una familia (redonda, cursiva y negrita, como mínimo). Forma parte de lo que llamamos ortotipografía, por ejemplo, utilizar las cursivas o itálicas en casos muy concretos, como para remarcar palabras de otro idioma o nombres de títulos de obras literarias o de arte. Recuerda que las letras cursivas tienen una legibilidad menor que las redondas como para utilizarlas en bloques largos de texto.

4. Pon mucha atención en el tamaño de las letras y en su legibilidad según el cuerpo empleado para cada caso.

5. Elige tipos con las letras lo suficientemente diferentes entre sí, para asegurar una correcta legibilidad y rapidez en la lectura. Para ello debes observar bien la forma o el "esqueleto" de la letra, su altura x, su peso o cantidad de negro y de luz, así como el contraste entre los rasgos de los signos.

PÁRRAFO

6. Limita el ancho de linea de texto, ni muy larga ni muy estrecha. Piensa que si es larga (con más de 60 caracteres) al lector le cuesta más esfuerzo poner el foco de forma continuada en todas las palabras que va leyendo. Si la linea de texto o columna es corta (menos de 25 caracteres), el lector se ve obligado a moverse demasiadas veces al pasar de una línea a la siguiente.

7. Cuida el interlineado o espacio vertical entre lineas de un mismo bloque de texto. Debe de haber un espacio blanco suficiente para que no puedan juntarse los rasgos inferiores de una linea (g, j, y, p...) con los rasgos superiores (l, t, f...) de la linea siguiente. Normalmente suele ser un 20% más en puntos de la interlinea con respecto al cuerpo de la letra.

8. Alinea los textos a la izquierda, especialmente en los documentos o publicaciones web. Si se justifica el texto en ambos lados, formando bloque, no olvides separar o partir con guiones el texto y dejar sangría al inicio de cada párrafo para que el lector, al visualizar los bloques de texto, reconozca rápidamente los comienzos de cada párrafo.

9. Evita las mayúsculas en palabras completas, frases y párrafos. Reservalas para alguna cabecera, apartado o título breve.

10. Busca el contraste máximo entre el color de las letras y el fondo.
Si utilizas colores de fondo cuida que se lea bien el texto: letras oscuras sobre colores claros y viceversa. También hay que tomar precauciones al colocar textos sobre fotografías e imagenes con mucha variedad de tonos y degradados.